día 38 del 'omer, tifEret de Iesod (subimos por la escala de Avot 6,6). Cada cualidad nueva que logramos adquirir, no es sino resultado y progenie de los pasos previos. Me he ocupado hasta ahora de enmendar mi "definición de mí", y la sensación que mi actitud vital genera en quienes me rodean. A partir del punto de equilibrio que hoy hemos de consolidar, saldremos del laboratorio íntimo para aplicar el tikún global sobre el mundo de la acción. A la cabeza del camino, propone nuestra mishnah el modo en que vamos a incidir desde ahora en nuestro mundo, adquiriendo la cualidad de quien "carga el yugo con su amigo", con su prójimo; y como explica rav Kehati: "participa y se compadece de la pena de su amigo, y le ayuda ya con su cuerpo, con su patrimonio, con buen consejo y guía correcta". No mirar para otro lado ni atender al espejo cuando tengo frente a mí a alguien que necesita de lo que puedo brindar. Así se rectifica en el Iesod la cualidad de tifEret, la verdad, el equilibrio, la armonía, la salud y la medicina, para nosotros y para cuanto amamos y anhelamos.
tifEret de Iesod: El estado de salud y armonía interno fundamental para la aproximación al otro. Antes de que el Novio pueda cortejar eficazmente a la Novia, debe cerciorarse de que sus fuerzas propias tienen dirección y sentido bellos y verdaderos, que abrigan y no quiebran, que alumbran y no queman. De esa cualidad de tifEret resultará un Iesod eficaz, hábil de impartir Shalóm.
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