יום ראשון, 8 ביוני 2014

שלח לך עליה ב

שלח לך עליה ב - גבורה בשבוע. במ' יד,ז: שבו המרגלים אל מחנה ישראל ואולי מתוך פחד לחיות כפופים לטבע, הוציאו דיבת הארץ רעה. ויהושע בן נון וכלב בן יפנה, מן התרים את הארץ, קרעו בגדיהם. "ויאמרו אל כל עדת בני ישראל לאמר: הארץ אשר עברנו בה לתור אתה, טובה הארץ מאד מאד". 
שני מעשים עשו המרגלים בקשר אל הארץ, כנאמר: עברנו בה, לתור אותה. מן המידבר, קבלו עליהם שליחות שצריכה להתבצע בארץ ישראל: אי אפשר לקיים את השליחות מתוך תודעה של המידבר, מתוך ראיה של המידבר; כי אם צריכים המרגלים, נשיאי ישראל, לראות את הנולד, להסתכל מאחורי הפרגוד, והכל יתגלה להם באורח נכון ומתוקן. רק שניים זכו לכך, ואנחנו חוזרים על מעשה זה כל שנה כדי ללמוד להיות בעצמנו חלוצים טובים, תרים טובים החולצים ומתירים את הארץ (המלכות) אל העם (בבחינת ו' מידות אמצעיות) החפץ בה.
ארץ ישראל היתה מכוסה במציאות מפחידה ומחרידה: עמלק, בני ענק, נפילים, בכל מקום שעוברים פוגשים שיירות בדרך לקבור מתים. הם מעידים "עברנו בה", השווה 335: כאשר עברנו בה אחזו נשמותינו במעשה "הר סיני" = 335, שם הכתרנו את בורא עולם בתואר "מלך מלכי המלכים" = 335. ואם כן, לא נפלנו במלכודת האשליות שנועדו להבריח אותנו מהיעד של כל מסענו, ארץ אשר עיני ה' א-להיך בה מראשית השנה ועד אחרית השנה. וכן היינו שם "לתור אותה", השווה בערכו 1042 לפסוק האומר [ישע' ס,א] קומי אורי כי בא אורך וכבוד יהוה עליך זרח; החתן הקורא אל הכלה: את האור שלי, רעייתי, ואני האור שלך, וכשאנחנו ביחד, דוקא "כבוד י-הוה" = 58 = "חן", זורח עליך ומשתקף ממך, ארצי, בייחודנו לברכה. 
אוי למי שהגיע לקיים את השליחות הנעלית מתוך ראיה שפלה. כי רק השניים היוצאי דופן יודעים לגלות אמת מאחורי הנראה, ולאחוז בכוחות הנכונים להגשמת כל המובטח על שם הארץ.
עד כדי שהמסקנה ברורה: "טובה הארץ מאד מאד"; ערכו 408, כמו "הודו לה' כי טוב כי לעולם חסדו"; הרי טיב הארץ יתגלה מידה כנגד מידה לפי ערך ההודיה, לפי ערך הכרת הטוב. הפוך מהסדר במידבר, שם זועקים לצרכים ומודים לאחר שהבקשות נתמלאות, מי שרוצה לזכות בשיא ההדר והטוב, ינהג בגבורה ויזכה מתוך הודיה אמונית, מתוך ידיעה ראשונית בגודל חסדיו, הפותחת את הצינורות דרכם החסדים העצומים מתגלים אך בחיינו.


Shlaj Lejá, aliah 2 - Guevurah en la semana. Bamidbar 14,7: Ya retornaron los espías al campamento de Israel, y acaso por miedo a vivir gobernados bajo  las leyes naturales, hablaron de la tierra mal. Y Iehoshúa (Josué) y Calév rasgaron sus vestiduras. "Y dijeron a toda la comunidad de los hijos de Israel así: la tierra por la que pasamos para reconocerla, muy muy buena es la tierra".
Dos acciones reportan Iehoshúa y Calév en relación con la tierra: "pasamos por ella" ("'avarnu báh") y "para reconocerla" ("latúr Otah") -las traducciones no son literales-. Desde el desierto, aceptaron una misión que debe tener lugar en la tierra de Israel: no es posible cumplir la misión desde una conciencia teñida de desierto, desde el sistema referencial con que entendemos nuestra vida en el desierto; sino que deben los espías, jerarcas de las tribus de Israel, ver qué adviene, atisbar detrás de las cortinas y los velos, y sólo así se revelará ante ellos todo de modo recto y perfecto. Sólo dos lo lograron, y nosotros volvemos a estudiar este suceso cada año, para aprender a ser nosotros mismos buenos pioneros, conductores sagrados que provocamos el bien con nuestro pensamiento bueno, y conectamos a la tierra (la Maljút) con el pueblo (que representa a las seis sefirót intermedias) que la consagra en esponsales.
La tierra de Israel estaba cubierta de una visión amedrentadora, pavorosa: Amalék en el Neguev, hombres gigantes; en cada poblado por el que pasaban hallaban gente ocupada en enterrar a sus muertos. Iehoshúa y Calév dan testimonio: "pasamos por ella", que tiene valor 335: cuando pasamos por ella se aferraron nuestras almas a lo vivido en el "Har Sinai" que vale 335, donde coronamos al Creador con el título de "Rey de reyes de los Reyes" (Mélej Maljéi hamelajím), que también vale 335. Y así evitamos caer en la trampa de las delusiones prontas a ahuyentarnos del objeto de toda nuestra migración: la tierra que "los ojos de Hashém tu E-lokím en ella desde la cabeza del año hasta su culminación". Y pasamos por ella "para registrarla", que en su valor 1042 se liga al verso entero que dice (Isha'aiahu -Isaías- 60,1) "Lévantate luz mía pues ha venido tu luz, y el Honor de Hashém brilla sobre tí"; el novio llama a la novia: tú eres mi luz, amada, y soy la tuya, y cuando nos unimos, justamente el "Kvód Hashém" (el honor de Hashém) que vale 58 igual que la gracia y belleza sutil, brilla y se refleja desde tí, tierra mía, en nuestra unión bendita.
¡Pobre de quien salió a una misión sublime munido de una visión abyecta, mezquina, estrecha! Porque sólo los dos distintos saben descubrir la verdad detrás de lo visible, y apegarse a las fuerzas correctas y oportunas con que realizar todo lo prometido a nuestra unión con la tierra.
Hasta que la conclusión es clara: "Muy muy buena es la tierra", que vale 408, igual que el precioso verso "Hodu laHashém ki tov ki le'olám jasdó", "Agradeced a Hashém porque Bien, porque a todo el tiempo y el espacio del mundo alcanza su Piedad" (que aparece idéntico cuatro veces en el Taná"j); la bondad de la tierra (del Reinado de cada quien) se revelará en proporción directa a la gratitud, al reconocimiento ante lo bueno. Al revés del orden "normal" en nuestros desiertos, donde suplicamos a gritos y corremos buscando suplir necesidades y recién a la hora de la saciedad acaso agradecemos, quien anhela merecer la cumbre de lo bello que es lo bueno que es lo verdadero, debe conducirse con Guevurah, vigorosamente sin temer ir contra la corriente, con convicción, y recibirá cuanto le toca desde la matriz de su propia gratitud y fe, desde la convicción axiomática acerca de que la Piedad  divina es inmensa y ubicua; y esa convicción habrá abierto para él los conductos a cuyo través el Jesed más dulce se revela en nuestras vidas.


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